El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, ha admitido que hubieron influencias políticas en la elección de Qatar como sede para el Mundial de 2022. El suizo ha atribuido dichas influencias a los intereses económicos que unen a Europa con Qatar
El presidente de la FIFA, el suizo Joseph Blatter, ha reconocido que en la concesión del Mundial de 2022 en Qatar se detectaron influencias políticas de gobiernos europeos que esperaban ventajas económicas de la decisión. "Hubo influencias políticas directas, jefes de gobierno europeos que recomendaron a sus compatriotas que podían votar por Qatar, porque están ligados a ese país por fuertes intereses económicos", ha dicho Blatter en declaraciones publicadas por el semanario alemán "Die Zeit" esta semana.
Las declaraciones del presidente de la FIFA son un dardo envenenado contra el presidente de la UEFA, Michel Platini, que podría ser el rival de Blatter en la lucha por la presidencia de la FIFA en 2015. Platini admitió públicamente en su momento que había votado por Qatar y pocos días antes de la decisión había sido invitado a cenar por el entonces presidente francés, Nicolas Sarkozy, con el emir de Qatar presente.