"No tengo ningún reproche a mis jugadores. En la primera parte hemos tenido el control del partido y dos ocasiones al palo y una más que Bravo ha parado bien contra un equipo al que sólo le habían hecho seis goles en casa", ha añadido Tito Vilanova. El técnico cree que, a pesar de la ventaja que el equipo llevaba en Liga, todavía queda mucha competición por delante: "Queda mucha Liga, muchos partidos y muchos rivales difíciles a los que nos tenemos que enfrentar". Con la derrota en Anoeta, el Atlético de Madrid podría acercarse hasta los 8 puntos y el Madrid hasta los 15 si ganan el domingo.
Sobre la expulsión a Piqué, Vilanova ha sido claro: "De faltas como esta [refiriéndose a la que le ha costado la segunda amarilla al '3' azulgrana] ha habido 200". Con todo, ha señalado que "con el 0-2 nunca he pensado que sería un partido fácil. He visto a la Real mucho más intensa y mucho más equipo que hace un año".