Fue el 14 de abril y ganó el Barça por 1-2 con dos goles de Messi, el segundo de penalti, un dato esencial para Mou que vuelve a tirar de memoria selectiva acordándose sólo de lo que le interesa... cuando le interesa. El mal momento que atraviesa el conjunto blanco -a ocho puntos del Barça en Liga y dos pinchazos consecutivos en Champions- han obligado al técnico del Madrid a desviar la atención con argumentos que ya no engañan a nadie.
En general, el técnico portugués se ha mostrado seco y despectivo con la prensa de Madrid. Como cuando le han preguntado por qué cambió a Higuain al descanso del partido contra el Dortmund y no minutos antes, cuando se vio que se había hecho daño. Mou ha sido taxativo: "Esta pregunta no merece ninguna respuesta". O como cuando le han pedido si agradecía que no le hayan convocado demasiado jugadores para la jornada de selecciones de la próxima semana: "A quien tengo que agradecer esto los internacionales? No tengo que agradecer nada".
Mourinho también ha tenido una mención especial, dentro de su tono agrio y distante, para Benzema, que había pedido en una entrevista no estar tanto rato en el banquillo: "Yo paso 90 minutos allí", ha contestado el portugués. De cara al partido contra el Levante, precisamente ni Benzema ni Higuaín podrán estar a su disposición por lesión. Mou ha dejado claro quien hará de nueve: "Cristiano". Además, añadió que le acompañarán Di María, Ozil y Callejón en ataque. Arbeloa y Coentrao todavía son dudas.