España - Italia | Final Eurocopa 2012

Las selecciones de España e Italia llegan a la final de la Eurocopa presentando números y apuestas de juego similares. En números, ambos están invictos en cinco partidos y han superado una tanda de penaltis. Y en juego, ambas selecciones han ofrecido en general un juego sólido, técnico y ofensivo. (20:45h, Telecinco)

La Europa periférica, ironías de la vida, domina esta competición. Para España, el título supondría batir un récord: conseguir una Eurocopa, un Mundial y otra Eurocopa seguidas. Para Italia, un renacimiento futbolístico que enterraría el oscuro "catenaccio" del pasado y las manchas del escándalo de las apuestas. Sigue en directo la final de la Euro

El precedente de la primera fase

La prueba de que la final no tiene un claro favorito es el partido que abrió el grupo C de la primera fase. Los hombres de Prandelli sorprendieron España con un sistema defensivo eficiente y sobre todo con una valiente vocación ofensiva liderada por un Pirlo genial. Un aviso que el azulgrana Xavi tiene muy en cuenta de cara a la final: "Italia ha cambiado muchísimo, quiere la pelota, no es el 'catenaccio' de antes. Una de las claves será la posesión. Ambas selecciones la queremos". Casillas, el capitán, va más allá y prefiere ser prudente cuando le piden sobre su pronóstico: "Ellos saben a lo que juegan y en ningún momento pensamos que somos los favoritos".

El debate del falso 9

En aquel primer partido nació la polémica sobre el falso 9, una posición con aroma azulgrana que Del Bosque ha plasmado en Cesc pero que no acaba de convencer. Y eso que el de Arenys hizo el empate contra Italia. El técnico dio una oportunidad a Torres contra Irlanda (4-0) y el chico no lo decepcionó: dos goles. Pero ni así se aseguró la continuidad. Contra Croacia, en la última jornada, España tuvo que trabajar duro para ganar en las postrimerías (1-0, Navas) para pasar como primera de grupo. Italia derrotaba los irlandeses con goles de Cassano y Ballotelli y recuperaba el crédito devaluado por el empate con Croacia.

Una de cal y otra de arena

En las eliminatorias, España se mostró superior ante Francia en cuartos de final (2-0) con Cesc de falso 9. Y fue Xabi Alonso el doble goleador. En las semifinales, España tuvo que sudar la gota gorda con Portugal para llegar a la final (0-0, 4-2 en los penaltis). Esta vez Negredo hizo de 9 ... y tampoco resultó. A todo esto, Llorente aún está inédito en una competición que Soldado sigue por televisión.

Mientras tanto, Italia invirtió los "tempos": sufrimiento contra Inglaterra (0-0 y 2-4 en los penaltis) en los cuartos y victoria convincente ante Alemania con Ballotelli ofreciendo su talento a base de goles a un equipo equilibrado que recordaba a la Italia de otras décadas (2-1).

Ahora toca la otra cumbre europea, la más esperada por todos, la del virtuosismo futbolístico encarnado en Iniesta y Pirlo, los dos candidatos a jugador más valioso del torneo. La de un virtuosismo que contrasta con la época de crisis y de austeridad que sufre sobre todo la Europa del Sur, siempre asediada por fantasmagóricos rescates y primas de riesgo desbocadas. España o Italia, por muchas razones, siempre recordarán aquel verano de 2012.