El día después que se conociera que tendrá que someterse a una artroscopia y estar seis semanas de baja, Carles Puyol ha comparecido en rueda de prensa animado y seguro que todo saldrá bien. "Esto es como una revisión del coche. El año pasado lo veía más negro, pero este no, lo veo todo de color de rosa, pronto estaré al máximo". El calvario que pasó la temporada anterior le está sirviendo para vivirlo con más confianza: "Entonces no sabía qué lesión era, mientras que aquí está clara y los médicos me han recomendado hacer una limpieza ya. Si siguiera jugando perjudicaría a mi equipo y a mi rodilla".
Se autodescarta para la Eurocopa
La inoportuna lesión le hará perderse lo que queda de temporada con el Barça y muy probablemente la próxima Eurocopa. El capitán azulgrana lamentaba no poder estar en el Calderón: "Es un mal momento, da rabia. Para mí la final de Copa es el partido más bonito del año, es impresionante. Intentaré ayudar en todo lo que pueda a mis compañeros desde fuera y disfrutar de la final".
Respecto a sus opciones de estar en Polonia y Ucrania, Puyol ha sido claro: “Lo veo muy complicado, a ver cómo va la operación, pero creo que será imposible porque hay un tiempo de recuperación". Y seguía: "Tenía muchas ganas de jugar el partido internacional número 100 y de ir a la Eurocopa, pero ahora mi única idea es operarme y recuperarme tan rápido como sea posible. Seguro que saldrá bien". Además, considera que en una cita de esta magnitud "lo más justo es que vayan los que están mejor".
"Me quiero retirar en el campo y no en un quirófano"
A pesar del contratiempo, Carles Puyol, de 34 años, no cierra las puertas definitivamente a la selección española. "Si tengo una cosa clara es que me quiero retirar en el campo y no en un quirófano", manifestó. En este sentido, aseguró: "La próxima temporada lo valoraré y tomaré una decisión".