"Tanto el equipo como yo estamos bien. Llevamos una dinámica muy positiva", ha afirmado Sergio Busquets en la rueda de prensa posterior al entrenamiento de este miércoles. Aún faltan 10 días para el clásico y el centrocampista azulgrana prefiere ir paso a paso: "Primero pensamos en el Levante, que es el próximo rival. Es un campo muy difícil, donde encontraremos a un equipo que está haciendo una gran temporada". "Para nosotros ya hace tiempo que cada partido es una final. El partido del Real Madrid será importante porque es un duelo directo", ha reconocido el '16' del Barça.
"Ahora mismo es un punto de desventaja, que pueden volver a ser cuatro este mismo miércoles. Nosotros también habíamos tenido ventajas similares en años anteriores. Tenemos la presión justa", ha explicado Busquets sobre la situación actual en la Liga. "Delante hay un gran rival. Creo que tienen una situación privilegiada porque son los líderes. Nosotros hicimos nuestro trabajo, que era ganar. Esto etaba en nuestras manos. Del resto no podemos hacer nada", ha añadido el mediocentro. "No cambiaría nada porque la situación es la que es. Lo que sí me gustaría es ser líderes, como en los últimos años".
Actitud y compromiso
Para Busquets, el reto es ir paso a paso y trabajar diariamente para recortar puntos: "Este equipo siempre ha sido regular". "Yo creo que siempre corremos. Nunca se nos puede reprochar falta de actitud o de compromiso", ha afirmado uno de los titulares este martes contra el Getafe. Un esfuerzo que no está reñido con la felicidad: "También es esencial. Quiere decir que las cosas se están haciendo bien".
El futbolista azulgrana, que asegura que cada día aprende más cosas, insiste en no mirar más allá. "Todas las temporadas han sido casi inmejorables. A principios de curso no puedes pensar nunca dónde vas a estar a esta altura de temporada, pero sí que puedes trabajar para estar vivo en todas las competiciones". "Lo que es divertido es llegar al final y ganar el título y trabajamos para conseguirlo", ha concluido.