De nada le ha servido al Betis adelantarse pronto en el marcador y ser atrevido para detener la racha victoriosa del Real Madrid. Los verdiblancos, con un planteamiento ofensivo y un fútbol alegre, han rozado la sorpresa en el Benito Villamarín, pero han acabado cediendo por 2 a 3 ante la voracidad de un colectivo arbitral decidido a sentenciar esta vergonzosa Liga.
El árbitro debutante, Sagués Oscoz, con dos clarísimos penaltis no señalados ha rescatado al Madrid y ha sofocado la rebelión de un Betis que ha merecido más, pero que no ha podido, o no le gan dejado, frenar el líder de la Liga. La victoria de los de Mourinho vuelve a estar salpicada de polémica porque las manos de Xabi Alonso y Sergio Ramos podían haver cambiar el signo del partido, y quizás de la liga. Además, no hubo rojas para Kaká (2ª amarilla), Marcelo (manotazo) y Ramos (penalti). El defensa andaluz debió ser expulsado en la jugada del penalti, Kaká, por doble amonestación tras un planchazo esperpéntico y Marcelo, por un manotazo a Nelson que debió ser atendido por sangrar en la barbilla. A todo esto hay que añadir el gol ilegal de Cristiano, por fuera de juego posicional de Khedira. El alemán obstaculizó a Fabricio en el remate de Ramos previo al tanto.
El Betis salió dispuesto a plantar cara al Madrid y lo ha conseguido en una primera parte muy equilibrada por juego y ocasiones. En la primera que ha tenido el equipo andaluz, ha marcado Jorge Molina. En el control anterior de Rubén Castro el balón le puede haber tocado el codo, pero ni siquiera los jugadores del Madrid lo han protestado. La réplica madridista llegó en una rápida contra. Higuaín ha sido más rápido que Dorado para hacer el 1 a 1. Antes del descanso, dos buenas ocasiones, una en cada portería. Salva Sevilla ha enviado una falta al larguero. El balón ha llegado a desviarlo Casillas. Al otro lado, ha sido Cristiano quien, a pesar de romper el fuera de juego, no ha sido capaz de superar al portero Fabricio.
Dos clarísimos penaltis no pitados... otra vez
La segunda parte ha comenzado con un sospechoso cambio de árbitro. Lesionado Iturralde González por un tirón muscular, el silbato lo ha cogido el cuarto árbitro, Sagués Oscoz. Y ha tenido trabajo en un partido que se ha abierto mucho. El gol de Cristiano en el minuto 50 parecía decantar la balanza, pero el Betis ha reaccionado de inmediato y al cabo de dos minutos Jefferson Montero ha hecho el empate a dos. El gol ha animado a los de Pepe Mel, que han estado a punto de volver a marcar, pero ni Jefferson ni Rubén Castro han podido superar a Casillas.
En el minuto 63, el árbitro no ha visto una mano de Xabi Alonso dentro del área que habría supuesto un penalti. Y del posible 3 a 2 en el 71 se ha pasado al 2 a 3 en una nueva acción de oportunismo de Cristiano Ronaldo, que de esta manera ha hecho su 32 º gol en la Liga. Y el partido ha acabado con más polémica porque el Betis ha reclamado mano en una acción de Sergio Ramos en el último minuto del añadido. Dos penas máximas en el área blanca que podrían haber cambiado el signo de un partido vibrante. Con el pitido final, Mourinho no ha dudado en ir a saludar al colegiado vasco, árbitro de Segunda B tras perder la categoría esta temporada. Con este nuevo triunfo salpicado de polémica, el Real Madrid se sitúa de forma provisional con 13 puntos de ventaja en la clasificación y traspasa toda la presión a un Barça obligado a ganar en el Nuevo Sardinero.