Dudas antes del Clásico

El Barcelona ha cosechado dos empates justo antes del clásico contra el Real Madrid

Tras ganar todos los partidos de Liga y Champions disputados hasta el momento, el Barcelona ha cosechado dos empates seguidos en los dos partidos que tenía que disputar justo antes del “Clásico” ante el Real Madrid del próximo sábado

El equipo sigue invicto en competición oficial, algo que no deja de ser positivo, pero fue incapaz de doblegar a Osasuna en el Reino de Navarra y al Milan AC en San Siro, en dos encuentros que fueron bastante parecidos y donde se volvió a echar en falta alguna táctica diferente que permita al equipo crear más ocasiones y anotar más goles cuando los rivales se encierran y juegan con los 11 jugadores como defensas.

Se suponía que las nuevas medidas y cambios en el juego del Barça que estaba implantando “Tata” Martino iban encaminadas a ese fin: Generar más peligro ante la meta rival cuando el equipo se estanca ante las defensas estáticas y pobladas de los oponentes. Sin embargo, en estos partidos no ha habido ninguna solución que se haya aplicado, y lo peor, tampoco se ha visto al equipo con intención de aplicar nada diferente, es decir, que otra vez tanto ante los pamplonicas como ante los milanistas, el conjunto blaugrana se chocó de frente ante los zagueros rivales sin más recurso que el pase corto, lento y sin peligro que no suele acabar en una oportunidad de gol clara.

Esta semana la televisión inglesa Sky Sports está haciendo un repaso de los “Clásicos” Barça – Real Madrid disputados en los últimos años. El pasado martes fue el turno de repetir en el canal deportivo británico el derbi liguero de la temporada 2010/2011 en el Camp Nou, aquel partido en el que el F.C.Barcelona de Pep Guardiola le endosó un 5 a 0 al Madrid de José Mourinho. Viendo de nuevo aquel partido donde al Barça le salió todo bien y el Madrid no tuvo su día, es cierto que hay algo que, por lo menos en aquel partido en concreto, ha cambiado muchísimo con respecto al Barça actual, y no es otra cosa que la velocidad de circulación del balón. 

Por aquella época, los Xavi, Iniesta, Villa, Piqué y demás jugadores de la plantilla hacían los pases a una velocidad realmente rápida. Parecía que hubieran puesto una norma donde se le prohibía al jugador tener el balón más de 3 segundos en su posesión a no ser que fuera para regatear uno contra uno o para posicionarse y chutar a portería. Y es que, precisamente, ese ha sido el principal error del Barça en estos dos últimos partidos donde no se ha conseguido la victoria. El equipo ha estado muy espeso, con una especie de miedo a perder el balón que les hace a todos los jugadores mantenerlo eternamente en su posesión hasta que ven a alguien a quien pasar sin arriesgar lo más mínimo. La pregunta es si ese miedo a perder la posesión puede estar propiciado por el mismo subconsciente (o incluso el propio conocimiento) de la plantilla de que, evidentemente, cada vez que se sufre un contraataque la jugada acaba en una pesadilla, o en gol en contra o en ocasión muy clara para el rival. El error defensivo del martes ante los “rossoneros” no es más que la enésima constatación de un hecho contrastado: La línea defensiva no está al nivel del resto del equipo.

Tampoco la presión es la misma, y como sucediera la temporada pasada, se le deja demasiado tiempo a la defensa rival para pensar y avanzar libremente cuando tiene el balón. Éste sigue siendo el otro aspecto en el cual hay que seguir trabajando para recuperar la intensidad defensiva de otros años.

Pero cuando el Barça tiene la posesión, que es el 70% de cada partido, es cuando hay que mejorar urgentemente porque sí hay jugadores para ello. Desde luego, si el equipo no es capaz de jugar más rápido cuando tiene el balón en su poder es IMPOSIBLE ganar el derbi de dentro de 48 horas. Pero es que si no son capaces de tocar la pelota con más velocidad tampoco pueden ser aspirantes a una competición como la Champions League, donde hay ya varios equipos que hacen un fútbol mucho más rápido, directo y efectivo que el del Barça, y a los que no se les ganará jugado “a ralentí”.

Sin embargo, hay algo que invita al optimismo para el Clásico del sábado, y es que el Real Madrid tampoco está en su mejor momento. Ancelotti sigue sin dar con la tecla adecuada para que su equipo genere buen fútbol, sin embargo, la velocidad de algunos de sus jugadores lo siguen haciendo un rival más que temible. También sufre el Madrid en defensa más de la cuenta esta temporada, con lo que el derbi se puede convertir en un festival de goles. O quizá volvamos a ver un Madrid encerrado atrás como solía hacer Mourinho cuando entrenaba a los blancos, de hecho, poco o nada ha cambiado el estilo de juego de los madridistas con la llegada del entrenador italiano.

En cualquier caso, volverá a ser un partido especial, más si cabe por ser el primero de Martino y Ancelotti como técnicos de Barça y Madrid respectivamente, así como el primero para Neymar y Bale. Si el Barça sale victorioso volverá a ponerse a 6 puntos de su máximo rival y seguirá conservando el liderato. En caso de empatar todo seguirá igual, a 3 puntos, y en caso de caer derrotados se pondrían ambos equipos empatados en la tabla de clasificación, lo cual sin ser una catástrofe sí que sería como un volver a empezar de cero.

La afición azulgrana confía en la victoria pasado mañana, pues el Camp Nou siempre suele inclinar la balanza en favor del equipo en los partidos especiales como éste. Una lástima lo del empate cosechado en Pamplona en la última jornada liguera, porque incluso la renta se podría haber ampliado a 8 puntos en caso que el Barça gane el derbi. Pero eso ya es pasado, y lo que ahora importa es de nuevo el presente y sobre todo el futuro. Y el futuro se llama “PARTIDAZO A LA VISTA”.

Marcelo Méndez Mingot