Los rossoneri han cambiado algunos jugadores respecto a la pasada temporada, pero siguen bajo la batuta del mismo técnico. El próximo rival del Barça en la Champions destaca por su calidad en ataque y mayor estabilidad defensiva
El Milan, el próximo rival en la Liga de Campeones del Barça, continúa con el rejuvenecimiento de su plantilla iniciado hace dos temporadas. Ya lo pudieron comprobar de primera mano los azulgrana en la temporada pasada, cuando se encontraron en los octavos de final. Como entonces, a los italianos les dirige Massimiliano Allegri, pero con novedades importantes en sus filas. La principal es Mario Balotelli. El delantero italiano llegó a mediados de la temporada pasada al Milan, pero no pudo ser inscrito en la Champions y vio la eliminatoria contra el Barça desde la grada. Ahora, a pesar de los problemas musculares, es la gran amenaza milanista. Forma un ataque lleno de talento con El Shaarawy.
De hecho, los principales refuerzos para Allegri esta temporada han sido en la zona de elaboración y en la delantera. Es el caso de Kaká (Madrid), Matri (Juventus) y Saponara (Empoli). El músculo en la medular lo aportan De Jong y Muntari y la creatividad Montolivo y Robinho. Por contra, entre los futbolistas que abandonaron el club el pasado verano se encuentra Kevin Prince Boateng, goleador en dos de los tres últimos partidos del Barça en San Siro. Una ausencia de peso. Tampoco están ya otros ilustres como Ambrosini o Yepes.
Cambios en los laterales
Indudablemente, la línea del Milan que generaba más dudas a principios de temporada era la retaguardia. En los dos partidos contra el Barça jugaron Abbiati (portería), Abate, Mexes, Zapata y Constant. En el presente ejercicio, Allegri sigue utilizando la misma pareja de centrales (Mexes-Zapata), pero en los laterales se ha ganado un puesto Emanuelson y el otro se lo disputa Constant con Zaccardo. La última incorporación, Adil Rami (Valencia) no podrá jugar hasta enero.
De momento, el equipo aún no ha encontrado la consistencia necesaria para estar en lo más alto de la Liga italiana. En la séptima jornada es duodécimo, a 13 puntos de la Roma, con 13 goles a favor y 13 en contra.