La calidad de Mesut Özil ha rescatado al Real Madrid en su visita al Nuevo Zorrilla (2-3)

El Valladolid ha plantado cara y se ha avanzado en dos ocasiones con dos goles de Manucho pero primero Benzema y luego Özil, por partida doble, han dado la vuelta al marcador adverso y han permitido al Real Madrid situarse de forma provisional a ocho puntos del Barça.

Que el Madrid sufre para defender las jugadas a balón parado es una evidencia y el Valladolid lo ha aprovechado para poner en muchos problemas al equipo de José Mourinho. Precisamente el primer gol de los locales llegó en el minuto 6 a la salida de un córner. Ebert ha puesto el balón en el área pequeña y Manucho, aprovechando la pasividad defensiva de los blancos, a fusilado a Casillas a bocajarro.

La alegría local ha sido efímera y la respuesta del Madrid inmediata. En el minuto 12, Callejón ha aprovechado un error de Sereno para asistir a Benzema, que no ha perdonado firmando el empate a uno. Pero en una jugada casi calcada al 1-0 ha llegado el segundo gol local. Ebert saca el córner con precisión y Manucho, de cabeza, volvió a adelantar al Valladolid. El alemán, una de las revelaciones en este inicio de temporada, ha estado a punto de hacer el tercero con un lanzamiento de falta que se ha perdido rozando el palo de Casillas.

Prácticamente a continuación, Ebert se ha lesionado y no ha podido continuar sobre el terreno de juego. Y cuando parecía que al descanso se llegaría con el 2-1 a favor del Valladolid, Özil, tras una gran combinación con Benzema, ha hecho el empate a dos justo antes del descanso.



Özil marca las diferencias

En la reanudación, Mourinho ha hecho un cambio muy atrevido en busca de un triunfo vital. El portugués ha dejado en el banquillo a Nacho, el lateral izquierdo, y ha hecho entrar a Di María, una variación que ha supuesto que Callejón jugara de lateral resto del partido.

En el minuto 65, el Madrid ha visto como el árbitro le ha anulado de forma equivocada un gol a Sergio Ramos por fuera de juego. El Valladolid, jugando con mucho atrevimiento, ha resistido hasta que en el minuto 70 Özil ha vuelto a marcar las diferencias. Un impresionante disparo de falta del jugador alemán, que ha clavado el balón en la escuadra, ha supuesto el 2-3 definitivo y ha dado tres puntos de oro a un Madrid que a pesar de sufrir más de la cuenta confía en un tropiezo del Barça el Villamarín para seguir soñando con la Liga.