La realidad del show nocturno


Ya no saben que más hacer, los programas de humor nocturnos ya no saben que camino seguir y parece que hayan perdido totalmente la cabeza. Ni información, ni opinión, tan sólo obsesión.

La obsesión tiene nombre y apellidos, y se llama Lionel Messi, y es que parece que su candidatura al Balón de Oro como máximo favorito se ha convertido en un problema de Estado. Parece como en las campañas electorales, cuando los políticos buscan el voto indeciso, como si con la repercusión que tienen o pretenden tener a nivel internacional consiguieran que un entrenador, capitán o periodista con su voto decantará la balanza a favor de Cristiano en lugar de Messi.

Lo que quizás no caigan, es si esta estrategia es la mejor a seguir, y es que esto se les puede girar en su contra, más que nada porque ha de quedar claro es que si alguna cosa tienen los shows nocturnos deportivos es poca credibilidad, capaces de decir hace un año que Guardiola quería traspasar a Villa, para pasar a decir ahora que Villa le pidió a Guardiola que le llevara a donde él fuera a entrenar, sólo para darle más valor a lo que ahora llaman la ‘Dictadura de Messi’.

Dudan. Tampoco tienen clara cual es la mejor estrategia a seguir porque mientras unos días hacen campaña a favor de Cristiano, al otro, sacan al tío de Andrés Iniesta para que exponga ante las cámaras su corazón blanco y pida el apoyo unánime de la prensa deportiva catalana hacia su sobrino con los ojos lagrimosos y todo indignado por el apoyo que Messi recibe en Cataluña, cuando su propio sobrino es el primero en reconocer que juega al lado del mejor futbolista del planeta.

Lo mejor es tomárselo con ironía, como un show del humor que lo que pretende es divertir a la gente, a pesar de que algunos se indignan con sólo verlo y tener claro que información poca darán que no sepamos ya, pero que seguidores en twitter ganarán, y risas alguna te sacarán.