David Villa ha reconocido afrontar el año "con muchísimas ganas de ayudar al equipo y lograr éxitos". Con todo, el Guaje no tiene ningún tipo de prisa. "Me faltan minutos de rodaje. He estado muchos meses parado, casi ocho sin competir, y eso ahora necesita un proceso. Hay que tener paciencia, porque precipitarme ahora no sería bueno para nadie. Todo lo que me he perdido ya no volverá por mucho que corra", ha asegurado.
David Villa quiere olvidar cuanto antes la larga espera que ha supuesto la lesión que se hizo en diciembre del año pasado en el Mundial de Clubes. Por ello, aseguró que "tengo muchas ganas de hacer un gran año". Ya hace semanas que Villa ha entrado en las convocatorias, pero sólo ha aparecido en el último tramo de las segundas partes. "Esto lleva un proceso. Si estuviera en otro equipo, ya estaría jugando. Pero aquí hay una competencia máxima. Ellos llevan otro ritmo. Hay mucho nivel", señaló el jugador.
Sobre la lesión, Villa ha asegurado que su recuperación de la rotura de la tibia es absoluta, que no tiene miedo de poner la pierna y que vive una "época de normalidad" con sensaciones "bonitas" que ha vuelto a vivir, para poder sentirse útil y futbolista. "Si entro en las convocatorias es que ya estoy al cien por cien. Ahora me faltan minutos de rodaje, porque llevo mucho tiempo parado. Esto lleva su proceso", apuntó el delantero azulgrana.
Agradecido por el apoyo recibido
El jugador también ha dejado claro que, durante todo este tiempo lejos de los terrenos de juego, ha recibido inmensas muestras de cariño, incluso demasiadas: "El Club y la afición me han dado muchísimo apoyo en todo este tiempo, incluso a veces me ha resultado exagerado. Ahora lo que quiero es devolver todo este apoyo".
El Getafe, complicado
Sobre el partido de este sábado, Villa ha avisado de su dificultad: "Es una de las salidas que tienes marcadas en el calendario. Ya perdimos allí el año pasado". El delantero cree que es uno de los partidos difíciles, a la vez que clave, para mantener la distancia con el Madrid, ahora cinco puntos por debajo, una distancia que Villa no considera "normal" después de sólo tres jornadas disputadas.