Fue un partido fácil de pitar, con 4-0 a la media hora de juego, pero el valenciano
Mateu Lahoz se complicó la vida gratuitamente. El colegiado que tanto le gusta a
Jose Mourinho refrendó su cartel de árbitro que deja jugar, pero ayer se pasó, sobre todo en la primera mitad. Los jugadores del
Almería entraron con contundencia en varias acciones, sobre todo en la primera mitad, y sólo se fueron con una tarjeta amarilla, la que vio
Vargas en el minuto 42 por agarrar de la camiseta a
Iniesta. El colombiano incluso pudo ser expulsado si hubiera castigado con una segunda amonestación una entrada sobre
Messi...
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MD
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