La palabra 'derrota', a mi parecer, queda más que corta para definir lo que se vio en el partido de ayer por la noche. Nunca tan pocas personas habían hecho tan felices a miles de personas mientras que a otras les hundían en su propio infierno. Muchos eran los que desde hace semanas se jactaban del buen momento del Real Madrid mientras menospreciaban a un Barça que se encontraba a tan sólo 1 punto de distancia en la clasificación. Por otra parte, cabe destacar que el juego desplegado por el Madrid en las últimas semanas ha sido digno de un equipo campeón de Europa, como era de esperar, pero al llegar al infierno culé, estos chicos vestidos de blanco se han achantado para dejar paso a la verdadera máquina de hacer fútbol. Esta no es otra que el Barcelona, el Barcelona de Pep Guardiola.
Con multitud de campeones del mundo en sus filas, el mejor jugador del planeta dentro de la plantilla y un entrenador que con sólo tres temporadas como míster ha logrado el éxito total, era de esperar que esto terminara por ocurrir. El Barcelona arrasó literalmente a un Real Madrid que tuvo que limitarse a ver como el balón se paseaba por delante de sus ojos sin poder evitarlo.
Finalmente, la 'manita' que todos reclamaban tanto desde la grada como de los hogares se hizo efectiva y el gesto de Piqué tras el gol final, confirmó el dato. 5-0... pocas veces se ve ese resultado en clásico, y más, si se trata de un encuentro entre dos equipos a pleno rendimiento. Esta vez, ambos conjuntos llegaban con las pilas cargadas tras un comienzo de temporada espectacular pero finalmente terminó por imponerse el fútbol, es decir, a lo que juega el Barcelona.
Este resultado era algo inconcebible en la mente de cualquier merengue pero ni más ni menos, terminó siendo así. Villa, Xavi, Jeffren y Pedro fueron los encargados de humillar a un Madrid totalmente destruido tras este espectacular resultado. Pasado el clásico, llegan los artículos de opinión, crónicas, reclamaciones, etc. pero en todos ellos tiene lugar la habitual alabanza al conjunto de Josep Guardiola. El de Sant Pedor ha sido el máximo responsable de lo ocurrido este partido pero no merece quedar en la memoria como 'el partido del 5-0' si no que, a este resultado, deben sumársele algunos datos a tomar en cuenta que mantienen relación con dicho número.
En su tercera temporada como entrenador del Barcelona, puede declarar alto y claro que no tiene metas, lo ha ganado todo y la única motivación que le mantiene con ganas de continuar en su profesión es la tratar de repetir los éxitos cosechados. Al margen de los títulos, goles, galardones individuales, etc. cabe destacar un dato más que significativo. Como ya es sabido en todo el mundo. 5-0 ha sido el resultado del 'clásico de los clásicos'. Sí, también es cierto que el Barcelona consigue el liderato y a su vez es necesario dar la razón a los que hablan de humillación al Sr.Mourinho.
Ahora bien, muchos son los que dicen ¿5-0? Eso qué es, ¿el resultado del partido o el número de clásicos ganados consecutivamente por el Barcelona? Sí, señores, el Barcelona ya suma cinco clásicos consecutivos saliendo victorioso pero esto no ha sido pura casualidad. Todo comenzó allá por el 2008 cuando un joven que procedía de un pueblo de Cataluña pasó de entrenar en 2ª B a sentarse en el banquillo del primer equipo del Barcelona. Un hecho importante tanto para el propio entrenador como para el club, que le daba la confianza a un novato sin experiencia alguna en la profesión de entrenador.
Este tipo, Pep Guardiola, cosechó en su primera temporada algo insólito como fue el famoso 2-6 en el Bernabéu pero meses antes, en el Camp Nou, este mismo hombre ya derrotó a su máximo rival por 2-0 dejando patente su destino en este mundo. Como bien he dicho, vino el 2-6 de forma inesperada conquistando el corazón de todos los aficionados al fútbol, tanto, que ese resultado quedó fijado en la historia como un mito. Al año siguiente, el mismo tipo humilde estrujó a su equipo al máximo logrando derrotar al Madrid 1-0 y 2-0 en los siguientes enfrentamientos.
Mientras tanto, la llegaba de Mou al banquillo madridista hacia presagiar un cambio en el resultado pero lo ocurrido ayer, solo confirmó lo que todos nos temíamos coincidiendo incluso con el resultado del encuentro. Pep y el Barça lograban un 5-0, tanto en resultado como en clásicos consecutivos a su favor. En resumen, los clásicos tienen un dueño y ese no es otro que el F.C.Barcelona. Muchos dirán que esto sólo es una época, y tienen razón, pero una época tan gloriosa que será recordada durante años. Por ello, de todo corazón, le deseo mucha suerte al Sr.Mourinho y sus jugadores en otro equipo porque lo que es en el Real Madrid, el destino está escrito.
Escrito por Danicaba | El Banquillo Visitante