El público del verano es otra cosa

Pep Guardiola buscó la complicidad de uno de los rostros más felices de la Llotja, la de su amigo Manel Estiarte, cuando el árbitro señaló el descanso. Lo que se cruzó fue una señal, casi imperceptible, de fugaz pero intensa empatía en torno a ... LEER NOTICIA