El Parma, referente del fútbol italiano y europeo de los años 90, está a punto de desaparecer. El equipo italiano, con tres títulos europeos en sus vitrinas, no tiene dinero ni para pagar la luz y podría ser declarado en quiebra el próximo 19 de marzo
El Parma-Udinese del pasado domingo tuvo que ser suspendido porque el club no podía pagar a los empleados y abrir el estadio Ennio Tardini. La deuda estimada del club está en un mínimo de unos 100 millones de euros. Atrás quedan los maravillosos años 90, en los que el Parma amenazó el reinado de (el entonces) todopoderoso Milan y tuvo en sus filas jugadores como Gianfranco Zola, Faustino Asprilla, Hernán Crespo, Hristo Stoichkov o Fabio Cannavaro. Nunca consiguió el "scudetto" pero una Recopa y dos Copas de la UEFA hablan del nivel que llegó a alcanzar.
Este martes, el tribunal de Parma ha decretado que el 19 de marzo se dicte sentencia sobre la situación del club, pero no parece haber otra salida que la quiebra y la refundación del club. De hecho, algunos acreedores ya se han llevado máquinas de la sala de gimnasio del equipo como forma de cobrar las deudas. "Las hemos visto de todos los colores y en esta situación la única salida parece la declaración de quiebra", dice el capitán del equipo, Alessandro Lucarelli. Último clasificado de la Serie A, las instituciones futbolísticas intentan ahora que el Parma pueda al menos terminar el campeonato. "Si podemos jugar, jugaremos. Incluso si tenemos que pagar de nuestro bolsillo el próximo desplazamiento a Génova, pero la situación actual no es sostenible", dice Lucarelli. "No he visto ni un euro -confirma el ex jugador del Atlético de Madrid, Cristian" Cebolla "Rodríguez. Jugamos gratis, pero no nos podemos quejar. Peor están los fisioterapeutas o los otros empleados", dice. La mayoría de jugadores están buscando una salida.
100 años de historia
El Parma creció a la sombra la Parmalat, pero la quiebra de la empresa de productos lácteos, hace 10 años, ya afectó al club e incluso su presidente entonces, Calisto Tanzi, terminó en la prisión por irregularidades contables. Ahora, con el club terminando de celebrar sus 100 años de existencia, su estrella está a punto de apagarse. La situación del Parma es la más grave entre los grandes equipos italianos, pero no es la única. Todo el fútbol italiano está en crisis y ya hace años que los grandes no pueden competir en el continente.