2013-07-18

Y es que la aparición en escena de Guardiola, la venta de Thiago, los desmentidos de Rosell y las últimas declaraciones de Tito, junto con toda la información y opinión generada en torno a esos asuntos, han eclipsado por completo cuestiones realmente importantes como por ejemplo que el equipo ha comenzado ya a entrenarse.

Como son muchos los dimes y diretes surgidos a raíz de estas polémicas, quizá valga la pena comentarlas una a una, aunque sea de manera rápida y sencilla, sobre todo poniendo el acento en porqué al socio y seguidor blaugrana no le importan o no le deben importar ninguna de ellas:

Guardiola y sus declaraciones: Empezaremos recordando que Pep, nos guste más o menos, no tiene nada que ver con Barça a nivel deportivo en estos momentos, es más, es el entrenador del verdadero equipo a batir este año en la Champions League. Vamos, que Guardiola entrena a nuestro máximo rival en Europa. Está claro que se le quiso, se le quiere y se le querrá siempre en Can Barça, y es que se ganó a pulso el cariño eterno de la afición. Ahora bien, que se lleve bien o mal con Rosell, que haya tenido más o menos problemas con Tito, o que esté en Nueva York, China o Singapur es algo que pertenece a su vida personal y que nos debe afectar poco o nada. ¿Estuvo acertado saliendo a hablar ahora de la directiva, de Tito y de que se quiere llevar a Thiago? Eso es algo que cada uno debe juzgar por sí mismo y que Pep llevará en su conciencia, tanto para bien, como para mal.

La venta de Thiago: Esto es si cabe más simple todavía de resolver. Thiago quiere más partidos. Guardiola le dio pocos hace dos temporadas, Tito le puso a jugar incluso algunos menos la pasada campaña, y parece que quienes más saben del equipo (que son los técnicos mientras no se demuestre lo contrario) tienen claro que Thiago no tiene una plaza fija en el once inicial cada partido como al jugador le gustaría. ¿Se ha equivocado el Barça dejándolo marchar? El tiempo lo dirá, ahora es imposible saberlo, puesto que Thiago es un jugador excepcional al que todavía le falta subir un par de escalones que en los últimos años no ha terminado de alcanzar. Tiempo al tiempo y toda la suerte para él.

Los desmentidos de Rosell: Hay quienes ven en las declaraciones del Presidente a un Sandro más seguro de sí mismo y ejerciendo como máximo mandatario sin tapujos. Entrar en guerras de este tipo con alguien como Guardiola no puede favorecer a nadie. A Rosell tampoco le va a servir para sumar ningún punto, pero él decidió que quería “aclarar” algunos aspectos y salió a la palestra. Lo mejor que puede hacer es pasar página y centrarse en el equipo, que también necesita un Presidente que dirija en barco hacia la dirección apropiada en los próximos meses. Su tono conciliador fue quizá lo más positivo, Sandro no es tonto y sabe qué representa Pep para el socio.

La rueda de prensa de Tito Vilanova: Quizá lo más sorprendente, ya que el míster entró de pleno en asuntos relacionados con Pep e incluso le echó en cara que no estuviera apoyándole cuando lo necesitaba. Sinceramente, esos son trapos bastante sucios que deberían ser lavados en casa. Cuando sales a dar una rueda prensa como entrenador del Barça hay que tener cuidado con las cosas que se dicen y con cómo se dicen. Si la historia es como Tito la cuenta, que tiene toda la credibilidad del mundo, desde luego Guardiola no se comportó correctamente o por lo menos no cómo Tito esperaba de él. Pero eso no quiere decir que sea algo digno de airear a los cuatro vientos, y como bien él mismo reconoció los “ismos” no importan ni interesan, así que sería genial que todos los dejaran aparcados de una vez por todas.

Mucho más interesante y acertado es lo que el entrenador dijo sobre lo deportivo, por fin alguien se acordó de lo que de verdad nos importa: “Se va a fichar seguro un central”, un alivio para todos aunque la pregunta es si hace falta incluso más de uno. “Cesc quiere triunfar en el Barça”, y Thiago también quería... Pero la cuestión es saber si podrá triunfar o si vale la pena buscar otras opciones. Y por último dijo que “Ahora somos más débiles que antes” y esto es quizá lo más relevante que hemos oído en las últimas dos semanas, ya que Tito reconoce que el equipo necesita mejorar y cuando hay un problema lo primero y principal es precisamente reconocerlo.

Esperemos que se decida lo antes posible el asunto del central, así como las bajas o altas que aún tengan que realizarse, y que el equipo pueda ponerse a trabajar al completo y a planificar la próxima temporada donde queremos hablar sólo y exclusivamente de FÚTBOL. A ver si se enteran algunos.