2013-07-19

El 22 de noviembre de 2011 y con el Barça en Milán, Tito Vilanova pasaba por el quirófano por un tumor en la glándula parótida

El 22 de noviembre de 2011 el FC Barcelona comunicó que Tito Vilanova padecía un tumor en la glándula parótida y fue operado de urgencia. Seis días después salió de la Vall d'Hebron y quince días más tarde, y aún sin el alta médica, Tito Vilanova volvía a los entrenamientos y recibía las muestras de afecto de toda la plantilla azulgrana, especialmente de Éric Abidal. Casi de manera inesperada, el técnico se sentó en el banquillo del Santiago Bernabéu tres días más tarde. Allí se hizo la foto más buscada: el saludo de José Mourinho.

Vilanova terminó la temporada con total normalidad, hasta el punto de que aceptó sin problemas el cargo de entrenador después de la salida de Guardiola. En el mes de junio era presentado.

Casi un año más tarde, el 19 de diciembre de 2012, Vilanova recayó de su enfermedad y se le detectó un pequeño ganglio. Volvió a ser operado en el Vall d'Hebron y recibió el alta dos días después. El 6 de enero de este 2013 reapareció en el banquillo contra el Espanyol y posteriormente viajó a Nueva York para hacerse varias pruebas.

Volvió para dirigir el partido contra el Málaga del 13 de enero y se volvió a marchar a USA, durante un período de dos meses, para recibir el tratamiento adecuado. El 29 de marzo de 2013 volvió a dirigir un entrenamiento y se sentó en el banquillo el 2 de abril contra el París Saint Germain.

El tratamiento le ha obligado ha viajar alguna vez más a Nueva York para hacer un seguimiento de la enfermedad, pero lo había podido compatibilizar con la responsabilidad en el equipo, lo que también pensaba hacer esta próxima temporada.