Las sensaciones que estaban dejando Barça y Real Madrid a lo largo del campeonato ya se están plasmando a efectos clasificatorios. El conjunto blanco ha perdido fuelle en los dos últimos desplazamientos y ha sido incapaz de resistir el ritmo de récord de los blaugranas. El partido de ayer en el Reyno de Navarra fue la confirmación de que los blancos están a años luz del líder y que los siete puntos de distancia reflejan con mayor justicia las enormes diferencias entre ambos conjuntos.

El Barça se encamina hacia el tercer título de Liga consecutivo de la ‘era Guardiola’ ante la desesperación de todo el madridismo. Su última esperanza se llamaba José Mourinho... leer más | Sport.es

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